Un fragmento de «Cyrano de Bergerac» ¿Y qué tengo que hacer? ¿Buscarme un valedor poderoso, un buen amo, y al igual que la hiedra, que se enrosca en un ramo buscando en casa ajena protección y refuerzo, trepar con artimañas, en vez de con esfuerzo? No, gracias. ¿Ser esclavo, como tantos lo son, de algún hombre importante? ¿Servirle de bufón con la vil pretensión de que algún verso mío dibuje una sonrisa en su rostro sombrío? No, gracias. ¿O tragarme cada mañana un sapo, llevar el pecho hundido, la ropa hecha un harapo de tanto arrodillarme con aire servicial? ¿Sobrevivir a expensas de mi espina dorsal? No, gracias. ¿Ser como ésos que veis a Dios rogando –oh, hipócritas malditos– y el mazo dando? ¿Y que, con la esperanza de alguna sinecura, atufan con incienso a quien se les procura? No gracias. ¿Arrastrarme de salón en salón hasta verme perdido en mi propia ambición? ¿O navegar con remos hechos de madrigales y, por viento, el suspiro de doncellas banale
Mentes Irreverentes es un blog para recordar a quienes no creyeron en los limites y nos regalaron un mundo diferente gracias a que se atrevieron a pensar diferente, a buscar otras opticas, a sentir diferente y a no seguir el camino facil.